martes, 6 de octubre de 2009

¡Que nos vamos para Estocolmo!

Mientras estudiaba ayer recibí un mensaje de Catherine diciendo que estaba organizando un crucero entre Suecia y Finlandia para el fin de semana del 13 al 16 de noviembre. Sonaba bien pero teniendo en cuenta el dineral que me voy a gastar de aquí a navidades y que tengo que estudiar para navidades no me llegaba a convencer del todo...
Pero una vez que hemos sabido precios... ¡¡¡nos vamos a Estocolmo!!! Vuelo ida y vuelta por 25 libras y el crucero por 50 con camarote y desayuno. ¡Tirado de precio! Y además 2x1 porque me hago un crucero, que es uno de los sueños de mi vida y ¡de camino puedo decir que he estado en dos países! ¡Qué ilusión!
Y además viajamos todos los de la residencia con lo cual la fiesta está garantizada en ese crucero de 11 plantas con cine, jacuzzi, discotecas, casino, etc.
Wow!!! ¡Qué subidón!

domingo, 4 de octubre de 2009

La fiesta del viernes noche

-A las 10 de la noche salimos para el Adelphi, ¿eh?- Eso es lo que nos pensábamos todos. Y es que para una vez que los españoles hemos sido puntuales nos aparece Simon (un letón que vive en el piso de abajo y que sube cada vez que le da la gana) a las 10 con unas calzonas y una camiseta de estar por casa.
-¡Carajote! ¿no habíamos quedado a las 10?- (bastante que se venga con nosotros ya que nadie sabe cómo se ha enterado de esa fiesta) -¿es que no vienes a la fiesta?-.
Su respuesta clara y contundente: -Sí, pero como siempre hay que esperar a alguien... además Chris está en su cuarto.
-Ya, pero es que Chris ya está listo, todos estamos listos, todos nos íbamos ya.
-Ah, pues esperadme 5 minutitos, que me cambio en nada.
Arggggg, puñetero Simon. ¡¡Un cuarto de hora nos tuvo esperando!! Todos con cara de mala hostia (es que poca gente le soporta) y los móviles sonando, señal de que todos nos estaban esperando.
Y es que íbamos a la macrofiesta, no tiene otro nombre. Una casa de 22 personas, 3 salones, 4 cocinas, 4 cuartos de baño... Una sola regla, invitar a todo el mundo que quieras.
Y la verdad es que la fiesta en sí estuvo bastaaaaante bien. Patatas para picar, chocolate (¡qué rico!) y en una mesita pequeña alcohol: una botella de Vodka, una de... ¿cómo se llama el anís ese raro Bego?, licores de manzana... Al final resulta que eran todas de un chaval, pero bien que sablamos de su botella xD. Pero sobre todo, lo mejor de la fiesta: todo el mundo Erasmus. Alrededor de 100 personas nos pudimos juntar allí, razón por la cual sucedió lo que sucedió.
Los dueños de la casa se vieron desbordados por la "fiesta americana" que se montó, con lo cual una inglesa empezó a echar a todo el mundo de la casa a gritos. Así que nada, a la calle que nos fuimos.
A mí me echaron a la calle a las 2 horas de haber llegado pero, eso tiene un precio, y ese precio se llama botella de Vodka escondida en el chaquetón ^^
La fiesta siguió esa noche...

Tortillica

OLE TUS HUEVOS MARTA, y tus patatas, y tu jamón de york, y tu queso. ¡¡¡Mmmmm, qué tortilla más rica!!! ¡¡Me ha encantado!!
Ufffff, deliciosa, si es que no tiene otro nombre!! Esa tortilla con 3 capas, la primera de patatas, la segunda de jamón de york y queso fundido y la tercera de nuevo de patatas... uffff, ¡¡deliciosa!! Obviamente tenemos que repetirla.
Y para este año prometo aprender a hacer tortillas, ¡que si están así de buenas necesito comerlas muy a menudo!